El presente post es para incidir en un tema que deberíamos de tener siempre en cuenta a la hora de invertir, especular, operar, tradear... llamémosle del modo que queramos (también en función de algunos condicionantes), pero a la hora de enfrentarnos al mercado y realizar operaciones, es imprescindible que hayamos tomado decisiones concretas respecto al Money Management.
Bien, el money management es el modo en el cual destinamos recursos financieros para dar soporte a nuestras operaciones en los mercados. Esto es, una vez decidido el porcentaje de nuestro capital que se dedicará a operar en mercado, establecer un porcentaje a su vez para la operación que estamos haciendo. Suena interesante, y me parece a mi que muy obvio, ¿cierto?
Bien, voy a contar mi experiencia, de forma muy resumida.
El money management es imprescindible porque de cómo tomemos estas deciciones, depende (y mucho, me atrevo a decir) nuestras posibilidades de éxito. Hay que tener en cuenta todos los posibles escenarios. Quiero decir, que una operación se plantea porque se le suponen unas probabilidades de éxito que justifican el riesgo que se asume. Perfecto, éste es el criterio fundamental a la hora de operar, pero hay que ponerse en lo peor, es decir, hasta qué punto puedo soportar rentabilidades en contra, y hasta que punto podría 'resistir' si, suponiendo que mi operación podría tener éxito, estoy con una rentabilidad en contra pero 'me merece la pena' soportar la pérdida para después tener opción a ganancias.
En este caso, por pura psicología, se soportan mejor pérdidas (ante la expectativa de una próxima ganancia) que ganancias. ¿Cómo es esto? Sí, cuando tenemos una ganancia potencial, y cerrando una operación vamos a conseguir plusvalías, nuestro sesgo mental suele inclinarse hacia realizar ganancias rápidamente, y al contrario con las pérdidas. Si estamos perdiendo, por inercia nos resistiremos a cerrar posiciones perdedoras, y trataremos, esperemos que de forma razonable, de soportar pérdidas 'momentáneas' para revertir luego la situación.
Esto que es un sesgo psicológico, que parece no tener relación directa con el money management, tiene una importancia capital. Una mala decisión de MM puede hacer que nos inclinemos a soportar pérdidas que objetivamente deben ser cortadas, y que nos obligan a cerrar una operación perdiendo, asumiendo el error y preparándonos para otras operaciones.
Creo que es un tema que trataré de exponer con más profundidad. Es crítico, más todavía en los entornos actuales, con tanta complejidad, una volatilidad extrema y unos mercados 'locos'.
¿Cómo explicar esto de forma sencilla?
Bien, el money management es el modo en el cual destinamos recursos financieros para dar soporte a nuestras operaciones en los mercados. Esto es, una vez decidido el porcentaje de nuestro capital que se dedicará a operar en mercado, establecer un porcentaje a su vez para la operación que estamos haciendo. Suena interesante, y me parece a mi que muy obvio, ¿cierto?
Bien, voy a contar mi experiencia, de forma muy resumida.
El money management es imprescindible porque de cómo tomemos estas deciciones, depende (y mucho, me atrevo a decir) nuestras posibilidades de éxito. Hay que tener en cuenta todos los posibles escenarios. Quiero decir, que una operación se plantea porque se le suponen unas probabilidades de éxito que justifican el riesgo que se asume. Perfecto, éste es el criterio fundamental a la hora de operar, pero hay que ponerse en lo peor, es decir, hasta qué punto puedo soportar rentabilidades en contra, y hasta que punto podría 'resistir' si, suponiendo que mi operación podría tener éxito, estoy con una rentabilidad en contra pero 'me merece la pena' soportar la pérdida para después tener opción a ganancias.
En este caso, por pura psicología, se soportan mejor pérdidas (ante la expectativa de una próxima ganancia) que ganancias. ¿Cómo es esto? Sí, cuando tenemos una ganancia potencial, y cerrando una operación vamos a conseguir plusvalías, nuestro sesgo mental suele inclinarse hacia realizar ganancias rápidamente, y al contrario con las pérdidas. Si estamos perdiendo, por inercia nos resistiremos a cerrar posiciones perdedoras, y trataremos, esperemos que de forma razonable, de soportar pérdidas 'momentáneas' para revertir luego la situación.
Esto que es un sesgo psicológico, que parece no tener relación directa con el money management, tiene una importancia capital. Una mala decisión de MM puede hacer que nos inclinemos a soportar pérdidas que objetivamente deben ser cortadas, y que nos obligan a cerrar una operación perdiendo, asumiendo el error y preparándonos para otras operaciones.
Creo que es un tema que trataré de exponer con más profundidad. Es crítico, más todavía en los entornos actuales, con tanta complejidad, una volatilidad extrema y unos mercados 'locos'.
Un saludo, feliz semana, y buenas operaciones.
Toni
Toni
No hay comentarios:
Publicar un comentario